GONZALO HERNÁNDEZ: NOTES

Por J. Gibran Villalobos | Curador

En el lenguaje, el cognado es el descendiente histórico de otras palabras. Las palabras, que a veces se escriben igual, se pronuncian en lenguas diferentes produciendo significados similares. A medida que el lenguaje sigue cambiando, las palabras, y su significado, también transforman las acciones. Comparativamente, Gonzalo Hernández (Lima, 1991 – vive en Miami) inicia su proceso a través del texto y el textil y transforma las frases en acciones que derivan en nuevos significados.

La etimología de texto y textil proviene de las palabras latinas textus. En el origen de su definición, la palabra se refiere al tejido. El textil es un tejido como el texto es el tejido conectivo de la acción. Hernández, como artista, sigue explorando la interconexión del mundo artístico. Sus obras textiles están envueltas en bastidores de madera, inspirándose en la estructura clásica del lienzo: uno de los principales métodos por los que los artistas se imaginan visualmente.

Sin embargo, sus frases «Buen Futuro» o «Pie Derecho» se refieren a declaraciones que pretenden que las acciones deseadas se materialicen. El artista aspira a la naturaleza material hacia un buen futuro, sólo posible a través de los pasos profesionales adecuados. Para Hernández, los tejidos tensados son sus mapas visuales entre la formación de los artistas, las referencias a la historia del arte, las acciones y situaciones que permiten a los artistas tener éxito en sus carreras.

Como podemos ver en la pieza escultórica Notes, se lanzan frases como pequeños conjuros: ¿Cómo es que mi obra llega al museo? Sus frases, que nos recuerdan a los números que aparecen en los teletipos de la bolsa de Wall Street, son preguntas continuas que conectan la estructura de lienzos envueltos en un bastidor con la frágil arquitectura de los mundos del arte: galerías, museos, academias y escuelas. En cualquier momento estas estructuras pueden caer y derrumbarse para cualquier artista.

En otra obra, Untitled (kneel), vemos un autorretrato del artista: arrodillado en el suelo, con las manos en la cabeza, tal vez interpretando una pregunta, o tal vez en la desesperación de la espera de un futuro aún por llegar. La sinceridad de esta pieza va más allá de la forma material de la tela sobre la madera, y se adentra en la acción visualizada, en el deseo del artista de materializar un Buen Futuro.

Estas obras culminan en dos modestos cuadros. Irónicamente, son representaciones de dos museos. Uno es el MALI (Museo de Arte de Lima) y el otro el Whitney Museum of American Art de Nueva York. Estos museos albergan no sólo los orígenes, sino también el destino futuro de muchos artistas. Hernández se dirige al origen de la naturaleza material, y envuelve su futuro en las hebras de la tela que aún están por tejerse.

Notes, de Gonzalo Hernández, se presenta hasta el 29 de junio de 2022 en Vigil Gonzales Galería, Pampa del Castillo 455, Cusco, Perú.